El Dotwork, o Puntillismo, un estilo muy distintivo y artístico dentro del tatuaje moderno. Hace un uso exclusivo de puntos en lugar de líneas para crear sombras, degradados y texturas; esto permite realizar diseños hiperdetallados y complejos, desde figuras geométricas hasta retratos estilizados.
Su estética monocromática es precisa, meticulosa y visualmente hipnótica, con profundidad lograda mediante la densidad y distribución de puntos
Los tatuajes en puntillismo consiguen detalles sofisticados en piezas personalizadas que se adaptan al cuerpo y significado deseado y que invitan a la meditación visual y emocional, ya que la repetición de puntos genera un efecto calmante y contemplativo.
Se inspira en técnicas artísticas de puntillismo de finales del siglo XIX (como las de Georges Seurat), adaptadas al tatuaje, y se populariza en dicho sector a partir de los años 90–2000, especialmente en Europa y América, como evolución de Blackwork y ornamental.
Está influenciado por patrones tribales, geométricos y mandalas, incorporando la técnica de puntos para sombrear y dar volumen sin usar líneas tradicionales.
Algunos artistas combinan Dotwork con efectos fractales y geométricos, creando piezas que parecen digitales o matemáticamente precisas.
Es ideal para quienes buscan un tatuaje distintivo y visualmente complejo por su estética hipnótica y artística. Además permite una gradación y sombreado sutiles, sin necesidad de color o degradados complejos.
Los puntos negros sólidos envejecen bien, por lo que son tatuajes altamente duraderos. También es versátil en composición y tamaño, puesto que funciona en piezas pequeñas, medianas y grandes; y compatible con otros estilos, como geométrico, mandala, Blackwork y Neotradicional.
Esta técnica invierte muchas horas de trabajo para piezas grandes por lo que un tatuaje en este estilo requiere un proceso largo y laborioso, y un tatuador especializado, que no rompa la precisión de los puntos.
Es menos adecuado para quienes buscan tatuajes rápidos o económicos.
Con este estilo los detalles muy finos pueden difuminarse con el tiempo, especialmente en pieles más gruesas o zonas de mucho roce.